Los antidepresivos son una herramienta fundamental en el abordaje de diversos trastornos psiquiátricos, no solamente el trastorno depresivo mayor. Se utilizan también en trastornos de ansiedad, trastorno obsesivo-compulsivo, trastornos por estrés postraumático, y otros cuadros clínicos en los que han demostrado eficacia.
El tratamiento con antidepresivos no finaliza con la remisión de los síntomas. Para prevenir recaídas y mantener la estabilidad emocional, es esencial continuar con una fase de mantenimiento adecuada. Interrumpir el tratamiento antes de tiempo puede aumentar significativamente el riesgo de recaída.
Duración Recomendada del Tratamiento
Las guías clínicas internacionales coinciden en que, tras la remisión de un episodio depresivo, el tratamiento con antidepresivos debe mantenerse al menos durante 6 meses. Sin embargo, la duración óptima puede variar según las características individuales del paciente:
• Primer episodio depresivo: Se recomienda continuar el tratamiento durante al menos 6 a 9 meses después de la remisión para consolidar la recuperación y prevenir recaídas.
(Guía de Práctica Clínica sobre el manejo de la depresión en el adulto – Portal GuíaSalud)
• Episodios recurrentes o factores de riesgo: En pacientes con antecedentes de múltiples episodios depresivos, síntomas residuales persistentes o comorbilidades, se aconseja prolongar el tratamiento de mantenimiento durante un mínimo de 2 años.
• Adultos mayores: Debido a un mayor riesgo de recaídas, en personas mayores se sugiere una duración del tratamiento de mantenimiento de al menos 12 meses.
(GPnotebook – Duration of treatment with antidepressant)
Un estudio de cohorte realizado en Dinamarca encontró que los pacientes que interrumpieron el tratamiento antes de los 10 meses tenían un mayor riesgo de reiniciar el tratamiento debido a recaídas.
(Jørgensen et al., 2021, Psychiatric Services)
Riesgos de la Interrupción Prematura
Suspender el tratamiento antidepresivo de forma abrupta o antes del tiempo recomendado puede conllevar varios riesgos:
• Síndrome de discontinuación: Síntomas como mareos, insomnio, irritabilidad y ansiedad pueden aparecer al interrumpir bruscamente el tratamiento, especialmente con antidepresivos de vida media corta como la paroxetina o la venlafaxina.
(Farmacia Atención Primaria Sevilla)
• Recaídas: La interrupción temprana del tratamiento se asocia con un aumento significativo del riesgo de recaída en la depresión.
(Scientific study, Psychiatry Research, 2024)
• Impacto en la calidad de vida: Las recaídas pueden afectar negativamente la funcionalidad y el bienestar general del paciente.
Conclusión
El tratamiento de mantenimiento con antidepresivos es una fase crítica en la recuperación de los trastornos mentales para los cuales han sido indicados. Mantener el tratamiento durante el tiempo adecuado, bajo supervisión médica, es fundamental para prevenir recaídas y mejorar la calidad de vida del paciente. Siempre que tengas dudas puedes acercarte a tu psiquiatra a fin de comprender bien los tiempos de tu tratamiento.